Resumen:
Una bella sonrisa es la característica más llamativa en la cara, el concepto de belleza se relaciona con frecuencia a la armonía y proporción. A menudo las exigencias estéticas con respecto al cuerpo y cara reflejan el deseo de retrasar el proceso de envejecimiento, es sabido que existe un vínculo estrecho entre la autoestima, apariencia física, la vida familiar, la vida profesional y el atractivo social lo que motiva al paciente a la búsqueda de tratamiento estético dental. La belleza no es un concepto inapelable sino una noción dinámica que evoluciona con el paso del tiempo dictada frecuentemente por factores culturales y preferencias individuales; por lo que resulta imperativo diagnosticar y determinar la proporción adecuada del diente como uno de los primeros pasos de construcción dentro del marco de la sonrisa para cada paciente antes de realizar algún procedimiento restaurador que sea irreversible. Los fracasos en estética dental pueden evitarse si prestamos adecuada atención a los factores determinantes de la armonía y proporcionalidad, así como la incorporación del paciente en la toma de decisiones, bajo la orientación del profesional. Esto puede ser un desafío cuando solo realizamos una ...