Resumen:
El objetivo de este artículo consiste en analizar las relaciones complejas que se establecieron en Argentina, desde la vuelta a la democracia (hecho ocurrido en 1983), entre el sistema judicial, el Poder Ejecutivo, y los medios de comunicación. La impresión que guía al análisis -breve por cierto- es que a partir de lo que podría ser visto como una moda pasajera -“la mediatización de la justicia”-, se ha generado una práctica que no solo posee su propia dinámica, sino que además, parece haber escapado del completo control de sus actores, los medios por un lado, los jueces y los políticos por el otro. Más aún, “la mediatización de la justicia” expone las potencialidades pero también las limitaciones de los primeros, mientras se ha vuelto en contra de los segundos, mostrando -a veces de forma preocupante-, sus carencias.