Resumen:
La educación universitaria adolece en muchas ocasiones de pensamiento sistémico, y este pensamiento desarrolla en los alumnos competencias que les serán necesarias en su futura vida profesional. Los modelos económicos tradicionales habitualmente consideran la toma de decisiones como un proceso racional y cognitivo, ignorando el papel que las emociones y sus componentes psicológicos desempeñan en la toma de decisiones económicas. En esta comunicación se presenta una actividad transversal realizada con alumnos de las asignaturas Habilidades Directivas y Fiscalidad Empresarial de la Universidad Europea de Madrid, en la que, a través de un supuesto de traslación impositiva y del Juego del Ultimátum, se pretende desarrollar el pensamiento sistémico de los alumnos, estudiar el altruismo y la cooperación en la conducta humana en el proceso de toma de decisiones, ayudar a los estudiantes a conocer las repercusiones que sus decisiones y acciones tienen en los demás en un escenario real y desarrollar competencias transversales como el trabajo en equipo, la toma de decisiones, negociación, comunicación, liderazgo, pensamiento crítico o juicio ético. Los resultados obtenidos han sido muy positivos.