Abstract:
La enfermedad producida por el SARS-CoV-2 ha modificado el discurrir social en los dos últimos años. Este coronavirus no ha producido el cambio de era al que asistimos, ya esbozada desde hace dos décadas, pero sí ha sido el principal coadyuvante que ha acelerado el proceso. Uno de los aspectos más sobresalientes de esta mutación se relaciona con la digitalización de la sociedad. El confinamiento, dispar según legislaciones, pero omnipresente de forma global, sirvió para introducir todo tipo de reformas digitales. El mundo de la escuela es sin duda uno de los más
transformados. Las redes sociales, la gamificación de la escuela y el acceso rápido y fácil a la información promueven la apertura hacia la Sociedad del Conocimiento, dejando atrás los caducos modelos disciplinarios. Pero, como
efecto indeseado, se proyecta la sombra inquietante de las sociedades de control, de nuevos procesos de adicción, dominación y ciberabusos.