Mientras que la antología tiende a estabilizar el
presente, la colección tiende a desestabilizarlo,
a llevarlo a una situación crítica. La antología
construye un linaje intelectual para el presente
en el que apoyar una determinada práctica
arquitectónica. La colección traza el mapa
de sus fracturas, dibuja la cartografía de sus
oportunidades perdidas. Si en la antología es
el todo lo que determina el fragmento, en la
colección es el fragmento lo que determina
el todo. Interpretar Architecture Theory since
1968 como colección, como display, como atlas,
como archivo, como caja de herramientas,
como dispositivo mnémico, como teoría sin
autor...Todo eso significa aprovechar una de
sus principales virtudes. Porque a diferencia
de otros soportes teóricos, Architecture Theory
since 1968 muestra cómo se ha construido: es
una teoría “hecha con pinzas”. Parafraseando
a Alejandro de la Sota, se podría decir que
Architecture Theory since 1968 es una teoría
física en contraposición a una química, en la
que ningún elemento se mezcla con otro para
producir un tercero, sino que, con las pinzas,
siempre puedes dar con toda la personalidad
de cada elemento.
While the anthology tends to stabilize the
present, the collection tends to destabilize it,
to bring it into a critical state. The anthology
builds an intellectual lineage for the present
in which to support a specific architectural
practice. The collection traces the map of its
fractures, draws up the cartography of its
lost opportunities. If in the anthology it is the
whole that determines the fragment, in the
collection it is the fragment that determines
the whole. To interpret Architecture
Theory since 1968 as a collection, as a display,
as an atlas, as an archive, as a toolbox,
as a mnemonic device, as a theory without
an author... All this means taking advantage
of one of its main virtues. Because unlike
other theoretical supports, Architecture
Theory since 1968 shows how it was built:
it is a theory “made with tweezers”. To
paraphrase Alejandro de la Sota, one could
say that Architecture Theory since 1968 is a
physical theory as opposed to a chemical
theory, in which no element mixes with
another to produce a third, but, with the
tweezers, you can always find the personality
of each element.