Resumen:
Al comienzo de curso se dividió a los alumnos en tantos grupos como bloques temáticos tenía la asignatura. A cada grupo se le asignó un bloque temático y se dedicaron las primeras sesiones a preparar un proyecto que cada grupo tendría que exponer ante el resto de la clase. Dicho proyecto consistía en coordinar durante varias sesiones consecutivas el transcurso de las clases. Durante dos sesiones consecutivas cada grupo ejerció de experto-coordinador y fue el encargado de exponer la teoría de los temas correspondientes, aplicar actividades prácticas diseñadas por el grupo al resto de compañeros, y evaluarlos a través de un sistema de evaluación diseñado por el propio grupo. Cada grupo trabajó siguiendo las normas de un estatuto elaborado por los propios miembros del grupo y mediante un sistema de actas. Los grupos fueron rotando en el rol de coordinación según avanzaba el curso de manera que cuando el estudiante no ejercía de coordinador, ejercía de alumno. Los estudiantes que ejercían de alumnos eran evaluados por el grupo de coordinación del momento, y los grupos coordinadores eran evaluados por el profesor y por el resto de estudiantes a través de un sistema de escalas de evaluación facilitado ...